En mayor o menor medida, todos somos conscientes de que en México padecemos una prolongada crisis de seguridad pública y violencia criminal desencadenada por la delincuencia común y organizada...

...que cotidianamente ataca nuestra seguridad personal y familiar, nos despoja de nuestros bienes, agrede, amenaza y restringe los espacios de movilidad social que tenemos en las calles, colonias, comunidades, municipios y entidades del país.

Bajo estas circunstancias y ante el elevado incremento de los índices delictivos, que se ha dado de manera diferenciada en algunas ciudades del país durante los últimos 20 años, desde el ámbito de la sociedad civil se han ensayado diferentes formas de organización para enfrentar y erradicar estos flagelos, que van desde la integración de comités vecinales y de barrio, asociaciones municipales, consejos y observatorios ciudadanos, policías comunitarias y Mesas de Seguridad y Justicia (MSJ).

Derivadas del modelo aplicado en Ciudad Juárez, a partir de 2014 las MSJ se han constituido en un modelo de trabajo y colaboración conjunta entre ciudadanos y autoridades de los tres niveles de gobierno, que ha funcionado exitosamente en la operación de estrategias y acciones de prevención, contención y disuación de problemas específicos en materia de seguridad y justicia dentro del ámbito municipal y regional de 16 estados de la República mexicana.

Teniendo dentro de sus objetivos específicos la generación de información sobre la situación delictiva, en general, y sobre los delitos de mayor impacto, en particular; así como la elaboración de un diagnóstico sobre la problemática de la violencia, la inseguridad y la administración de justicia local, la formulación de propuestas para la prevención y contención del fenómeno delictivo, la creación de mecanismos de consulta y seguimiento para los acuerdos entre ciudadanos y autoridades, y la identificación de oportunidades para el fortalecimiento de las instituciones locales de seguridad y justicia.

Para su funcionamiento operativo, las MSJ adoptaron un conjunto de principios que las distingue de otras organizaciones, entre ellos:

• El constituirse en una organización independiente de los partidos políticos y que no recibe recursos del gobierno. Lo que permite a sus integrantes expresarse con total libertad, evitar condicionamientos y conflictos de intereses.
• Ser una forma de organización y participación convocada, dirigida y gestionada por ciudadanos. Donde la participación de sus integrantes es voluntaria, a título personal y/o en representación de otras organizaciones sociales o privadas.
• La incorporación de los miembros ciudadanos se hace con base en procedimientos informales, tales como el prestigio personal, el reconocimiento social y la adhesión a los valores de la Mesa.
• Los funcionarios no participan en la selección de los ciudadanos.
• Desde sus inicios, las MSJ se han orientado a mejorar las condiciones institucionales que permitan la reducción de los índices de los delitos de alto impacto. Todos los elementos de la Mesa - organización, agenda de trabajo, gestión y mecanismos de coordinación - están alineados con el objetivo de aportar soluciones a la crisis de seguridad local.
• La participación de los ciudadanos y los funcionarios es voluntaria, motivada por el interés de fortalecer la capacidad de las instituciones de seguridad del Estado. Las MSJ no buscan reemplazar la responsabilidad del Estado en la materia.
• Las MSJ adoptaron como guías de actuación tres principios: corresponsabilidad, confianza y eficacia.

En resumen, podemos concluir diciendo que
las MSJ son instancias de participación, aprendizaje social y encuentro de ciudadanos y funcionarios en donde se ensayan nuevas formas de diseñar, planear, implementar y evaluar políticas públicas de seguridad ciudadana para la reducción de la violencia y la criminalidad en el ámbito local.